20 Oct ¿Estás destruyendo sin saberlo la autoestima de tus hijos?
Hay algo más poderoso aún que una mente privilegiada, con un físico impecable, que un ingenio único, o una capacidad de memoria destacada. Os hablamos de la autoestima o confianza en uno mismo. Sin ésta, nada de lo anterior sirve para nada.
¿Cuántas veces las personas que han alcanzado el éxito habían fracasado previamente antes de llegar a él? ¿Cuántas personas con problemas físicos consiguen superarlos y cumplir sus objetivos?
La autoestima es la llama que mueve el mundo, si ésta es la adecuada, tarde o temprano los resultados terminan llegando.
¿Cómo podemos los padres estar afectando a la autoestima de nuestros hijos?
Cuando uno es padre, desea con todas sus fuerzas que sus hijos crezcan y evolucionen de la forma más segura posible, tratando de ser omnipresentes en sus vidas e interfiriendo en su día a día con el fin de protegerlos. De este modo, sin darnos cuenta, estamos generando precisamente el efecto contrario.
No existe un manual de cómo ser el padre o madre idea. Y por supuesto sabemos que lo último que quieres es crear esa sensación entre tus pequeños. No obstante, esto no quita que se esté produciendo.
Por ello, vamos a intentar darte algunas pautas para detectar, y evitar ciertos hábitos que deterioren su autoestima e incluso, consigas fortalecerla.
¿Eres de los que trata de protegerlos del mundo en todos los aspectos? ¿Prefieres evitar que se equivoque o mostrarle porqué se está equivocando si sigue por ese camino aún teniendo libertad de hacerlo?
Los niños requieren de unos padres que les quieran, apoyen, cuiden, guíen y alienten.
La autoestima, elemento fundamental del éxito
Estudios psicológicos afirman que la autoestima está presente en todos los aspectos relacionados con la evolución, el desarrollo positivo y el éxito. Es capaz de generarnos expectativas fundamentadas en la realización de algo por lo que, hace creer que si se persiste, se puede conseguir y todo está al alcance de todos.
¿Cómo puedo fomentar la autoestima y la confianza?
Supongamos que nuestro pequeño sueña con ser veterinario de mayor porque le apasionan los animales. ¿Cómo deberíamos y no deberíamos actuar para ayudar a conseguirlo?
1.- Apoyo escolar, no dependencia escolar. Esto quiere decir que es bueno que les ayudes con las tareas escolares, pero nunca jamás crear una dependencia. No llegues por él a las conclusiones, sino guíalo para que sea él quien las alcance por si mismo.
2.-Hazle sentir pasión más allá de la formación. La formación hay que alimentarla al mismo tiempo que la ilusión. Llévalo a visitar veterinarios, que pueda hablar con ellos y ver como trabajan, de modo que genere la expectativa necesaria para marcarse unos objetivos que irá superando día tras día.
¿Por qué es necesario permitir que se equivoquen?
Sencillamente, porque es la única forma de entender que equivocarse, no es sinónimo de malo. Aunque no lo parezca, en otros países los emprendedores que montan un negocio y fracasan, están valorados por la sociedad mientras que en nuestro país se les asocia con connotaciones negativas y fracaso.
Esto es debido a que allí se tiene la concepción de que si se ha equivocado, sabe como no debe actuar por lo que es bueno para volver a iniciar un proyecto empresarial con más garantías de éxito.
Sin embargo, si no dejamos que se equivoquen por sí mismo, cada vez que fracasen en algún aspecto de la vida lo verán como algo irreparable, y eso es realmente peligroso porque levantarse podemos todos, pero darte cuenta de que has caído es realmente complicado.
Por ello, enséñale a tu hijo que hacer las cosas por el mismo es lo mejor que puede hacer y que, tú estarás ahí para guiarle y hacerle ver que los errores que él cometa no son un punto final, sino anécdotas en su camino hacia el aprendizaje más importante que puedan adquirir… ¡la vida!
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